jueves, 29 de abril de 2010

"Caras de Inmigrante" por Francia Conchita Pereira.

La ley aprobada hace seis días es producto la intolerancia de ciertos norteamericanos hacia personas que día a día lo dan todo a un país poderoso, y según los sueños de personas que han nacido en otro entorno es el país de las oportunidades, el mal llamado sueño americano.

Este artículo tiene como base la interrogante ¿Quién es Estados Unidos? Si bien es cierto, este país fuerte el mundo lo considera una nación potente, representa el anhelo para muchos, sin embargo lo que vemos y oímos del mismo en la actualidad nos presente un país distinto, de pesadillas y desacuerdos.

La actual ley aprobada representa para personas que han pasado toda su vida trabajando en Estados Unidos una bofetada, que violenta principios como la igualdad, la tolerancia, la integridad, la dignidad y la no discriminación, así como el desprecio por el trabajo ejercido por los mismos.

Si bien es cierto, no tengo ningún familiar cercano en este Estado tengo una gran indignación, pena y dolor al darme cuenta que los mismos latinos están a favor de esta ley y mas disgusto es el hecho de que un salvadoreño la haya aprobado, ¿Dónde queda entonces la tolerancia? ¿Y es qué no todos somos latinos sin distinción a una residencia?

Estados Unidos seria entonces el país de las oportunidades o mejor dicho del trabajo desperdiciado; significa que cuando cientos de personas se convierten en estorbos pueden desecharlos así por así; esto es muy parecido a lo que sucedió hace más de cinco décadas, con la persecución nazi a judíos, solo por el hecho de características étnicas se asecha a personas que el único “delito” es buscar más fondos para su familia.

Se violenta además la libertad de pertenecer a un país que lo ha tenido todo de los latinos, así como los derechos humanos tan promulgados en diferentes convenios internacionales y la palabra dada por el Presidente Barack Obama de mejorar la situación migratoria; este hecho debe ser condenado internacionalmente, es momento de reprochar lo que hace este país poderoso, para que esta ley no se extienda más.

viernes, 9 de abril de 2010

Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados.

La Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados fue suscrita en Viena (Austria) el 23 de mayo de 1969 y entró en vigencia 27 de enero de 1980.
Fue elaborada por una conferencia internacional reunida en Viena, sobre la base de un proyecto preparado, durante más de quince años de trabajo, por la Comisión de Derecho Internacional de las Naciones Unidas. Su objetivo fue codificar el derecho internacional consuetudinario de los tratados y, además, desarrollarlo progresivamente.

El artículo segundo de dicha Convención define al tratado como un "acuerdo internacional celebrado por escrito entre Estados y regido por el derecho internacional, ya conste en un instrumento único o en dos o más instrumentos conexos y cualquiera que sea su denominación particular", por tanto sus disposiciones son aplicables sólo a tratados por escrito entre Estados; quedan excluidos de la definición antes descrita, aquellos que no constan por escrito y los acuerdos entre un Estado y otros sujetos de derecho internacional (como las organizaciones internacionales) o entre esos otros sujetos de derecho internacional.
No obstante, la misma Convención precisa que el hecho que no se aplique en tales casos, no afecta el valor jurídico de tales acuerdos, la aplicación a los mismos de cualquiera de las normas enunciadas en ella a que estuvieren sometidos en virtud del derecho internacional independientemente de la Convención y la aplicación de la Convención a las relaciones de los Estados entre sí en virtud de acuerdos internacionales en los que fueren asimismo partes otros sujetos de derecho internacional.

La Convención, en cuanto tal no posee efecto retroactivo, pues sólo se aplica a los tratados celebrados después de su entrada en vigor y no a los celebrados con anterioridad (sin perjuicio de la aplicación de cualesquiera normas enunciadas en ella a las que estén sometidos los tratados en virtud del derecho internacional independientemente de la Convención). Cuando las Naciones Unidas firmaron la Convención de Viena previeron que era importante hacer valer los derechos que contiene, por lo que en varios artículos difusos (es decir que no hay un capitulo que los contenga en orden), establecen las acciones, los recursos ante juez o arbitro.